Artículo escrito por Eusebio Sacristán, para "El Mundo Deportivo"
El Barça continúa su su camino en busca de la excelencia. Sus últimos partidos han sido una muestra de eficacia, brillantez y exquisitez en cuanto a la adaptación a las circunstancias, de motivación, de ambición y de espíritu solidario. En esa búsqueda un requisito esencial es la pasión, una condición que este equipo exhibe en cada actuación y que es el fiel reflejo de lo que estos jugadores asimilan del espíritu de su entrenador. Pero lo que les hace aún más grandes es el gusto por el juego, el respeto a los contrarios y la humildad que demuestran día a día.
El gusto por el juego se refleja en cada una de las acciones que realizan, buscando siempre situaciones que favorezcan el espectáculo, evitando faltas o parones, lo que permite al espectador degustar cada segundo del partido.
El respeto hacia los contrarios se confirma preparando cada partido como si fuera el más importante. Valorando las virtudes de cada rival, siendo conscientes de que en este deporte todos los rivales son capaces de, aprovechando bien sus cualidades, plantar cara a cualquiera. Y esto el Barça es algo que quiere evitar para seguir siendo el más grande.
Valorando el trabajo de cada entrenador, el espíritu de lucha de cada equipo y las condiciones de los jugadores, que siempre juegan con la motivación del que se enfrenta a un equipo histórico. Y todo esto con una actitud humilde, porque son conscientes de que son unos privilegiados, porque saben que están en un club único y en un momento ideal.
Por eso afrontan este momento con la sencillez y la naturalidad del que sabe que en el fútbol y en la vida todo es efímero. Por eso ahora disfrutan de cada partido de manera intensa, intentando mejorar día a día para prolongar el mayor tiempo posible este estado de felicidad, el mismo estado en el que el aficionado del Barça despide este año.
Todos sabemos de la importancia que tiene el fútbol para la sociedad. Y por eso hay que felicitaruna vez más a este equipo; primero porque esta haciendo feliz a mucha gente y segundo porque está siendo un gran ejemplo de cómo se puede ganar siendo deportivo, respetuoso y humilde.
Un ejemplo maravilloso para las nuevas generaciones de futbolistas, que crecerán
teniendo como referencia las habilidades técnicas de estos jugadores y la filosofía de juego de este equipo. Pero, por encima de todo, lo más valorable para ellos será el comportamiento personal de este equipo, que en eso también es el mejor
Todo el grupo podrá disfrutar de estas vacaciones merecidamente, aunque el último resultado en la Copa ante el Athletic demuestra que el próximo año habrá que volver con las pilas bien cargadas. Los equipos a partir de este último partido tendrán una referencia a la que recurrir. Pep le podrá dar otra vuelta más a su método y los jugadores del Barça estarán preparados para las dificultades que seguro encontrarán el próximo año
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